Esta marca de automóviles es fruto de la unión de un aristócrata piloto de carreras (Charles Rolls) y un ingeniero (Henry Royce), unión que se manifiesta en su lujo de detalles y en su perfección técnica. Las características decorativas de estos vehículos son aptas para sibaritas: la madera utilizada en sus salpicaderos es de nogal, escogida por un grupo de expertos en un proceso de selección de los bosques de California; los radiadores se hacen a mano, por artesanos que firman sus trabajos; el cuero de sus asientos se obtiene de unas vacas cuidadas con mimo y que no han sido siquiera atacadas por insectos (pero no todas las pieles de estas vacas se pueden utilizar, sólo aquellas que pasan el riguroso control de calidad que los expertos han diseñado); es más, hasta la estatuilla que corona su flamante frente está fabricada con un método artesanal, el conocido como «a la cera perdida».
Fuente: “1000 hechos insólitos, increíbles pero ciertos”
Editorial: Servilibro
Autora: Mª Luisa Valencia.
